Hace unos 5 meses nos dejo María una persona que me enseño, que todo es proponérselo
Hoy mi hijo me ha enseñado la misma lección
“Papa y si, si que puedo”
Tenia unas piezas por arreglar pero necesitaba una sujeción lo bastante fuerte como para poder montarlas.
No tenia claro como hacerlo, pensando si llamar a mi hermano o a un amigo que me echase una mano, mi hijo que llevaba un buen rato observando, me dijo si me podía ayudar. Con una leve sonrisa le dije que gracias, pero que era demasiado pequeño para ayudarme con aquello. No insistió más y se fue a por unos juguetes.
Seguí dándole vueltas al tema durante un buen rato, intentando varias cosas sin que ninguna surtiera efecto. Al rato volvió mi hijo, se quedo observando y me pregunto de nuevo si podía ayudarme. Le conteste de nuevo que era pequeño y no iba a poder.
El me respondió: Y si sí que puedo
A continuación siguió hablando explicándome como creía él que podía sujetarlo. En ese momento descubrí que podíamos hacerlo de esa forma.
Nos pusimos manos a la obra y en cuestión de 10 minutos tenia todo montado y el problema resuelto.
Como de toda historia podemos sacar una conclusión, en este caso yo pienso que varias
Olvida las ideas preconcebidas
Piensa en como conseguir algo, en lugar de explicar porque no lo consigues.
No lo intentes, únicamente hazlo.
Y ante todo escucha a tu hijo, ese tipo bajito que tiene siempre buenas ideas.
Comentarios
Publicar un comentario