Ir al contenido principal

Cuando viajo….


 Cuando viajamos, normalmente, solemos fijarnos en la ciudad o pueblo al que vamos, de una forma diferente, como descubridores de un mundo nuevo. Todo lo que nos rodea nos parece diferente, las calles, la gente, las casas, todo es observado como con ganas de recordarlo, más que nunca, ¡ para no olvidarlo vamos !

Todo llama nuestra atención, puede ser por lo diferente, por no ser lo que día a día vemos, diferente al bar en la esquina de casa que vemos al salir a trabajar, diferente al vecino que saludamos todos los días en el ascensor.

Lo vemos como un lugar en el que somos desconocidos y tenemos la sensación de que no importa lo que hagamos, no nos miraran, y si lo hacen, me da igual porque no los conozco ni me conocen. Esa sensación de desinhibición es algo que deberíamos recetarnos en dosis moderadas, ya que en cierta forma ayuda a vivir, quitarnos el corsé de la sociedad donde vivimos y respirar, es bueno, muy bueno.

Esta cita no he podido evitar ponerla, optimismo al poder.
“Nunca tiempos pasados fueron mejores” E. Punset



Comentarios

  1. A mi me sucede ahora y siempre, David, pero como no puedo andar viajando, ahora, con mucha frecuencia, practico lo de tomar café y alternar en barrios distintos al mío. Es genial, tanto como la frase de Punset con la que despides el artículo.
    MB.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares de este blog

Cuento de Navidad

En realidad más que un cuento o contar una historia, pretende ser un agradecimiento así que cambio el título " GRACIAS POR HABERME HECHO SONREIR " Si, esto se aproxima más a lo que quería contar, bueno todos estáis ya con los preparativos de final de año, con las propuestas para el siguiente, con la valoraciones de lo vivido, los recuerdos las experiencias. Todo genial. .... Pero yo este año, me quedo con toda la gente que me hizo sonreír, sonreír con esa sonrisa que hace que la serotonina fluya a caudales, provocando que sea imposible el enfadarse. La gente que hace que tus endorfinas, se abran pasó por el cuerpo provocando que las barreras, no parezcan más que pequeños bordillos que saltar con facilidad. La gente que te hace sonreír, que te hace conseguir el subidon de dopamina, que te causa el bienestar ante los retos y los objetivos conseguidos. Bueno, creo que agradecer en este año las sonrisas provocadas ,es algo indispensable. Muchos proyectos, a veces diría que demas...

La decisión de Nadine

Entre muchas otras Nadine resaltaba por su fuerza realizadora. Como si fuera un ciclón arrollaba los proyectos, poniendo toda su fuerza creadora, en las relaciones y en su vida ese ciclón también se ponía en marcha. Hace no mucho que conocí a Nadine y como en otras ocasiones, las casualidades y recovecos del destino, consiguen ayudarte a descubrir a personas increíbles. No era por trabajo, (aunque en una pequeña parte si he de reconocerlo), pero cuando Nadine entro en mi círculo de confianza lo hizo de una manera temerosa, abriéndose poco a poco, teníamos conversaciones cortas, concisas con mensajes breves solicitando respuestas, algo que evidentemente no tenía. Poco a poco, pasado un tiempo, Nadine fue abriendo su vida a través de las conversaciones que manteníamos, cada vez era más fácil hablar y llegar a aquellos temas que realmente le preocupaban, peor esos temas a su vez creció en complejidad.  Nadine se daba cuenta que tenía muchas decisiones que tomar, en cad...

La decisión de Mojca, “Maria” para los amigos.

Podríamos decir que conocer a Mojca fue una gran suerte. Mojca o María para los amigos, es de esas personas que te ayudan en la vida a darte cuenta, de que las cosas importantes, muchas veces vienen disfrazadas de lo más común y rutinario del mundo. Comer, dormir, disfrutar, con los amigos, jugar con tus hijos. Si, Mojca conseguía que pensaras en todo eso de una forma diferente, como si descubrieras  que cada vez que lo haces, es nuevo. Mojca se podría decir, que a sus 30 años, era el prototipo perfecto de mezcla de pueblos, tal vez por eso era así, tenia lo mejor de todos. Nació en Berna, de padre checo y madre holandesa y con abuelos italianos y alemanes, su árbol genealógico debía parecer una torre de babel. Pero vayamos a lo importante, hace ya algún tiempo Mojca visito mi ciudad y como no podía ser menos, me llamo para vernos, quedamos en ir a cenar. Apareció discreta, pero vestida con esa sonrisa que evitaba fijarse en sus tacones. Ufff siempre igual, me dejaba bajit...